“Porque esta gran humanidad ha dicho ¡Basta! y ha echado a andar. Y su marcha de gigantes ya no se detendrá hasta conquistar la verdadera independencia, por la que ya han muerto más de una vez inútilmente”
Ernesto Guevara de la Serna.
El avance de la consciencia de clase frente a las consecuencias de un modo de producción que en su afán depredador ha llevado a pauperizar las condiciones de vida de las inmensas mayorías desposeídas no solo de los medios de producción, sino de los más elementales derechos para su subsistencia, ha hecho que el pueblo sienta la necesidad de hacer las luchas más articuladas y que vaya en dirección de transformar esas realidades de miseria.
En este marco, se inserta la convocatoria al Paro Nacional que las organizaciones sociales, intelectuales, artistas, fuerzas políticas y el pueblo en general desarrollamos este 21 de noviembre, guiados por unas reivindicaciones sentidas y que lograron unificarnos al calor de la movilización, entre ellas rechazamos:
- La reforma laborar que se viene adelantando con la que se pretende aplicar un salario por debajo del mínimo, para menores de 25 años, la contratación por horas y diferenciado de acuerdo a las regiones, eliminación de las horas extras, el recargo nocturno, dominicales, festivos y cesantías.
- La reforma pensional que incluye el aumento de la edad de pensión, fortalece los subsidios bimensuales BEPS, que terminan siendo aportes cuentagotas, privatiza Colpensiones dejando las pensiones en manos de capital privado del grupo AVAL, aumenta las semanas de cotización para pensión y seguridad social.
- La Ley de Financiamiento, que baja o exonera los impuestos a los ricos y se los recarga a clase popular.
- Contra el “Holding Financiero” a través del cual se termina de privatizar lo público.
- La impunidad reinante en los actos de corrupción como ODEBRECH, REFICAR, HIDROITUANGO, INTERBOLSA, SALUDCOOP, Chirajara, Agro Ingreso Seguro, bonos Carrasquilla, IDEXUD Universidad Distrital, entre otros.
- La criminalización de la protesta social y el genocidio contra líderes, lideresas y defensores de derechos humanos abiertamente por la Fuerza Pública o con la guerra encubierta a través de acciones paramilitares.
- La militarización de los territorios y la utilización de la población civil como escudos humanos y fuentes de información para la inteligencia militar que han comprometido la vida, integridad y libertad de los pobladores.
- El saqueo y despojo de los territorios por parte del capital nacional y transnacional.
- Y contra los incumplimientos que este gobierno y los anteriores han tenido con lo pactado en movilizaciones como el Paro Agrario de 2013, la Minga Nacional de la Cumbre Agraria en 2014, las movilizaciones de 2015 y 2016, y el Paro Estudiantil de 2018.
Por todo ello, nuestra movilización no solo es justa sino necesaria y oportuna, a pesar de los intentos que el Estado y sus instituciones, así como los grandes medios de comunicación han hecho para deslegitimarla.En consecuencia, exigimos al Estado el desmonte de las estructuras paramilitares, la doctrina militar aplicada y de todas las medidas neoliberales aquí denunciadas que corresponden a las orientaciones de los imperios y organismos multilaterales como la OCDE, Fondo Monetario Internacional y Banco Mundial.
A la Fiscalía General de la Nación y la rama judicial, direccionar sus acciones hacia la superación de la impunidad en los casos de corrupción, criminalización de la protesta y el genocidio al movimiento social, de la misma manera, dejar de ensañarse contra los que pensamos diferente, nos oponemos a este régimen y trabajamos por la vida digna y la paz.
Al Ministerio Público y la Contraloría, ejercer sus funciones de vigilancia y control a la función del Estado y sus instituciones, especialmente que el Estado cumpla sus obligaciones nacionales e internacionales en materia de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario.
Reiteramos el llamado a la comunidad internacional a que en cumplimiento de sus mandatos realicen una labor de incidencia eficaz frente a esta hecatombe social, humanitaria y ambiental.
Por último, saludamos las heroicas luchas que libran los pueblos de Haití, Palestina, Nicaragua, Bolivia, Ecuador, Chile, Honduras, Venezuela y en general los pueblos del mundo que se alzan contra la explotación y opresión capitalista.
Al pueblo colombiano lo instamos a continuar profundizando la unidad y cohesión en las luchas por la transformación de esta sociedad. Ratificamos el llamado de Carlos Marx “Proletarios del mundo uníos”.
Centro Oriente de Colombia, 21 de noviembre de 2019.
¡POR UNA COLOMBIA LIBRE Y SOBERANA…¡UNIDAD Y LUCHA!
¡MOVIMIENTO POLÍTICO DE MASAS SOCIAL Y POPULAR DEL CENTRO ORIENTE DE COLOMBIA!!!
¡CONGRESO DE LOS PUEBLOS CONSTRUYENDO PAÍS PARA LA VIDA DIGNA!!!