Centro Oriente de Colombia, 28 de abril de 2021
Durante los últimos meses nos hemos encontrado los diferentes sectores y procesos sociales, gremiales y populares a nivel nacional, regional y local, para analizar la grave situación humanitaria y la profunda crisis
económica originada por la implementación del modo de producción capitalista en el cual se encuentra inmerso el Estado colombiano, que servil a los designios del mundo imperial aplica cabalmente las políticas establecidas para asegurar la acumulación, en ese sentido como proveedor de materia prima expolia los bienes de la naturaleza para entregárselo a las corporaciones transnacionales, pone en oferta la mano de obra existente en el país mal paga y sin garantías laborales, de seguridad social y con severas restricciones para la organización sindical y gremial, sumado a la privatización de los bienes de uso colectivo para el beneficio económico de los grandes empresarios nacionales y extranjeros.
Como conclusión de esos encuentros y luego de escuchar y percibir el sentimiento del pueblo que comprende y sufre las consecuencias de esa realidad política, social, ambiental y económica, hemos identificado que es este el momento preciso para profundizar la lucha y la movilización social.
Se trata de defender la vida y los territorios o estaremos destinados a desaparecer. Es un contrasentido que en plena crisis humanitaria evidenciada plenamente con la pandemia del Covid-19, el Estado colombiano pretenda descargar sobre las mayorías empobrecidas el recaudo de los fondos para el pago de la deuda interna y externa, a través de la implementación de más impuestos, peajes y aumento del precio en los combustibles, mientras se designan cuantiosas sumas de dinero para comprar aviones y tanques de guerra, camioneta blindadas, pagar programas de televisión para limpiar la imagen de altos funcionarios y tapar los desfalcos dejados por la corrupción; se continúe ejecutando el proceso genocida contra el movimiento social y sus dirigentes; se militaricen y paramilitaricen los territorios; se insista en continuar envenenando la vida y el entorno con las fumigaciones aéreas con glifosato; la implementación del Fracking como técnica para seguir el saqueo de los bienes de la naturaleza; y se empeñe en participar de los planes intervencionistas e injerencistas contra la hermana República Bolivariana de Venezuela.
Por ello, como pueblo organizado y con la participación de todas y todos nos convocamos al Paro Nacional que inicia hoy 28 de abril y que tendrá diversas actividades hasta el día 1 de mayo, a pesar de las talanqueras jurídicas y políticas que el régimen ha utilizado para tratar de evitarlo.
Esta actividad de carácter político y reivindicativo pretende no solo denunciar este orden criminal, sino principalmente despertar las mentes y elevar los niveles de consciencia como clase popular, comprendiendo que es una lucha de clases y que mientras exista el modo de producción capitalista depredador, inhumano y avasallador que somete, aliena y domina a los desposeídos de los medios de producción, no habrá condiciones de vida digna, por ende es imprescindible e inaplazable avanzar hacia la transformación radical de esta sociedad hacia otro mundo posible, donde las relaciones sociales se establezcan de manera cooperada y emancipada, en equilibrio dinámico con el entorno natural.
Llamamos al pueblo del centro oriente a sentirse orgulloso de sus orígenes y sus ancestros, de su legado de dignidad en la lucha y resistencia, y convencidos de la justeza de esta gesta, que no solo es legal y legítima, sino que es un deber ético con las presentes y futuras generaciones consecuentes con su historia. A comprender que la represión, violencia y trato de guerra que el régimen le da a las mismas, son producto del desespero por mantener el estatus quo, demostrando que vamos por el camino correcto y que no es tiempo de recular, al contrario, es momento de fortalecer la organización social y articular las luchas en lo regional, nacional e internacional.
Igualmente, exhortamos a las comunidades a ser sabios y pacientes en razón a que las molestias y perturbaciones que las actividades programadas puedan ocasionar en su vida cotidiana, son mínimas comparadas con la crudeza del Estado y sus estrategias, y la grandeza de nuestras apuestas.
A PARAR PARA AVANZAR, ¡VIVA EL PARO NACIONAL!!!
POR UNA COLOMBIA LIBRE Y SOBERANA, ¡UNIDAD Y LUCHA!
MOVIMIENTO POLÍTICO DE MASAS SOCIAL Y POPULAR DEL CENTRO ORIENTE DE COLOMBIA
CONGRESO DE LOS PUEBLOS – ¡CONSTRUYENDO PAÍS PARA LA VIDA DIGNA!